Lo esperaba. Tarde o temprano sucedería. Estaba resignado a mi esquiva fortuna, a ver la alegría sólo en los ojos de los demás, a servirme de la tristeza únicamente para unir versos hasta el infinito. Y, cruel vibración presagiada, el teléfono asoló mi corazón como un seísmo. Un respingo, mi garganta hecha un nudo y mariposas en el estómago, negras como tu primicia.
“Me voy”. Apenas cinco letras para decir adiós, un adiós amargo y no por breve menos mortífero. Un SMS mínimo en caracteres, pero máximo en tu duro e inapelable carácter. Los dedos de mi alma rota quisieron responder con un hasta siempre....pero la herida me desangró, cortó mi respiración, heló mis lágrimas secas.
Ahora que ya no estás, ahora que ya no estoy, te diré cosas que nunca te dije. Te diré que quise hacer mías tus huellas en la arena, pero el viento borró el camino castigando mi atrevimiento. Y el rastro quedó inacabado entre las dunas, sin llegar al bosque de la vida. Y tus pasos se esfumaron como nuestro amor, y sólo quedaron los míos....sin saber si van o vuelven. Sin rumbo.
Te diré que corté tu flor para que sólo fuera mía, pero su olor a jazmín se agotó. Y sus pétalos se tiñeron del amarillento cáncer, y sus verdes hojas barrieron secas mis pies, y su esbelto tallo se tornó escuálido y yermo. Y el riego de mi inconsolable llanto no fue suficiente para hacer rebrotar el jardín.
Te diré que quise robar la luna para ti, pero el sol cegó mis ojos....y de mis días ya sólo viví las noches. Y en mi oscura vida las estrellas brillaron por su ausencia, y no desperté más al alba junto a tu deseo dormido, y no hubo más atardeceres de manos entrelazadas ni besos naranjas con el mar en calma.
Te diré que te amo porque nunca te lo dije, pero ya no estarás para escucharlo. Y de tus labios no saldrán esos tequieros que me acosaban, y mi cuerpo no se rendirá a tus sensuales caricias, y tus pechos no buscarán el calor del mío en las tardes de invierno.
Tirada entre la hojarasca, en un mar de sangre, has soñado con mi amor correspondido. Sólo unos agónicos segundos porque, como si tuvieras prisa, tu consciencia te ha llevado en su último viaje y has dejado plantada a la vida. “Me voy”. Y he visto tu palabra cumplida....en la página de sucesos.
Me vuelvo a colar en tu rincón y comparto estos versos...
ResponderEliminarNo lloréis,
no derraméis gotas cristalinas,
ni suspiréis gemidos sangrientos,
¡no lo hagáis!¡no seáis hipócritas!
ya no está...se fue.
Se fue con la mañana fresca,
como la caída del rocío
en el rosal pálido.
Se escapó al vacío,
como una estrella fugaz
en una noche de verano.
Llegó a sentirse feliz
en su lenta agonía,
y vió la luz...
Abrió sus verdes ojos
diciendo su último adiós con una leve sonrisa.
Y volvió a recordar
en unos segundos...
el mar de caracolas,
el viento de otoño,
la fragancia de primavera,
la lluvia de abril...
y con mirada de niña inocente...
expiró.
Mertxe_Beriáin
Gracias Mertxe ... por derramar de nuevo tus versos sobre mi prosa ...explosión de poesía que inunda mi blog.
ResponderEliminar"Y volvió a recordar
en unos segundos...
el mar de caracolas"
Un beso
Un abrazo Pabloto. Que lo remontes lo mejor que puedas.
ResponderEliminarte quiero mucho
Pablito