viernes, 29 de octubre de 2010

Amor sin techo


Es noche cerrada en mi vida. Oscuros e imponentes silencios me envuelven hasta la asfixia, y mi lacerada alma arrastra desnuda sus penas por las angostas calles de la supervivencia. A la luz de la luna, bajo su toldo de estrellas, doy con mis huesos en los fríos adoquines y clavo mis ojos en el negro firmamento, esperando que se abra un claro en el cielo, deseando ver una señal tuya... aunque sea fugaz.

Eterna es la madrugada de mi amor que vive a la intemperie, cuando el invierno de mi existencia asoma su nariz helada, cuando ya no hay besos que cicatricen las heridas abiertas en mi corazón, cuando las oportunidades perdidas duelen más que la soledad de los últimos días de existencia… Pero en el molde de mis abrazos aún cabe el calor de tu pecho, y mis manos de explorador fracasado todavía sabrían recorrer con pasión todos tus tesoros escondidos, y la miel de tus labios sellaría para siempre los míos secos y cortados.

Infelicidad... infelicidad que sueña cambio sobre un improvisado lecho de mugrientos cartones, que en plásticos embutida crece generosa como una planta de invernadero, que en el alcohol de vino rancio y litronas encuentra su alienante caldo de cultivo, que vive sorda y ciega en su mundo decadente. Sin techo, endurecido por el viento de los sinsabores, roto por los puñales del desamor, mi corazón pulula en el más allá del inexistente limbo.

Y cuando mi dignidad está por los suelos, apareces tú para dar cobijo a mis desdichas. Y tu hermosa sonrisa hace millonario a mi amor indigente, y el brillo de tu mirada es un portal entreabierto en una gélida noche de enero, y al placer de tus caricias mi cuerpo entumecido recobra su deseo de tatuarse en tu piel hasta alcanzar el éxtasis absoluto. Entonces, sin techo, puedo vivir desnudo al abrigo de tu amor, puedo dormir enroscadito a tu espalda de terciopelo, puedo dar ese amor que, de rodillas y encartelado, tantas veces te supliqué céntimo a céntimo.

3 comentarios:

Nodicho dijo...

El amor, que nos hace esclavos y libres a la vez.

Mertxe_Berian dijo...

Versos que se cuelan de nuevo en tu dominio para abrigar tus sentimientos paseados a la intemperie...



La sombra de tu persona
me persigue
vaya donde vaya,
hora tras hora.

Vaya donde vaya,
hora tras hora,
mi cuerpo protegido
por una antorcha.

Mi cuerpo protegido
por una antorcha,
y nunca se apaga
su viva llama.

Nunca se apaga
su viva llama,
prendida perenne
en el seno de mi alma.

Prendida perenne
en el seno de mi alma,
esa antorcha
relumbra esperanza.

Esa antorcha
relumbra esperanza,
esa sombra
comparte mi andanza.
Mertxe

Pablo Roncal dijo...

Cierto, cierto ... Cable ... el amor con su tiranía y su atracción fatal ... mueve el mundo y nos mueve como marionetas .... a veces felices, a veces tristes .... sin dónde parar ni a dónde ir ....

El amor ... Mertxe ... frío y cálido cuando quiere ... noches a cobijo y noches sin techo ... versos de amor y versos de desengaños ...

Gracias ... :)